Manzana
(Pyrus malus)


Es un pomo de más de 5 cm de color muy variable según las variedades.

Esta es otra de las frutas que podríamos escribir muchas páginas y nunca haríamos honor a sus bondades. De hecho el profesor José Castro que vivió en Torrente Valencia escribió un libro que tituló "LA MANZANA COMO ALIMENTO OPTIMO MEDICINA Y GOLOSINA", y en verdad es una verdadera maravilla cuanto en el escribe, las recetas que da, las experiencias que expone y las propiedades que describe sobre la Manzana.

Sobre la manzana hay un dicho popular que viene de un proverbio ingles que dice: "Una manzana al día al médico alejado mantendría" Como todos los dichos populares este también es verdad; porque la manzana es la fruta más favorable a la salud y a la nutrición del ser humano. No en balde tiene la fama bien ganada de: "La Reina de las frutas".

Este fruto es conocido en todo el mundo y abunda siempre en todos los mercados por lo que no creo sea necesario detallar las características del fruto del manzano (Pyrus malus), especie cuyo nombre latino significa literalmente "fruta de pepitas".

El gran número de variedades de manzano son el resultado del cruzamiento y selección de diversas estirpes silvestres, y su cultivo es inmemorial. Nos cuenta la historia que al principio de la vida del hombre, en el Paraíso Terrenal, ya existía el manzano. Lo que nos hace pensar que el hombre se alimentó con esa fruta desde remotísimas épocas, porque además en las viviendas lacustres prehistóricas de los valles alpinos han aparecido restos de manzanas identificables.

Las manzanas tienen distintas composiciones, según la casta a la que pertenecen y su grado de madurez. En general contienen una notable cantidad de azúcares, que oscila desde 6 al 12 %; tienen azúcar de uvas y azúcar de frutos, dextrosa, y levulosa, y algo menos de sacarosa o azúcar de caña. De ciertas excelentes variedades se sacan jugos que dan hasta 14 % de azúcares. Contiene también pectina, protopectina, pentosanas, etc.

Aparte de algunas variedades no ácidas, la mayor parte de las manzanas tienen ácidos orgánicos en cantidades importantes (hasta 1,5 %), entre ellos ácidos málico (ácido de manzana), cítrico, y pequeñas cantidades de ácido succínico y láctico.

El ácido salicílico se encuentra combinado, al parecer en forma de Ester metílico. Hay manzanas las llamadas asperiegas, con notable cantidad de materias tánicas.

En las manzanas también está en abundancia la vitamina C, a veces en cantidades (de 40 a 50 unidades por kilogramo); pero debemos tener en cuenta que, las oxidasas de este fruto, que ponen amarillenta o "herrumbrosa" su carne después de cortarlas, destruyen en gran parte dicha vitamina. Por lo es conveniente comerlas después de peladas sin demora.

En las cenizas de la manzana se hallan las siguientes sales minerales: Potasio, calcio, hierro, sodio, aluminio, fósforo, y cloro. Una manzana grande, según Hauser, contiene: vitamina A: 0,18.- Vitamina B: 4,0.- Vitamina B 1: 2,4 Niaciamina: 2,6.- Vitamina C: 9.-

La manzana debe comerse siempre como primer plato, nuca como postre. Porque sus ácidos y sales orgánicas ejercen un efecto desinfectante en el aparato digestivo a la vez que estimulan sus secreciones como los fisiólogos han demostrado.

La consecuencia es que el apetito se despierta y las digestiones discurren con mejor ritmo. Aparte de que por ser un alimento natural se digiere con mayor facilidad y antes que el aliento cocido. Para postre si se desea comer manzana, debe ser al horno, nunca cruda.

La manzana es un alimento tan completo que, con manzanas, pan integral y agua una persona podría pasar sin carencias de ninguna clase, salvo el deseo de comer otros alimentos. Al mismo tiempo es un alimento que según y cuando se convierte en medicamento.

Quiero destacar que siempre hablamos de las manzanas dulces que son las que nos alientan, no de las agrias que sirven para la fermentación y obtener la sidra.

Se calcula que en la actualidad hay más de 3.000 clases de manzanas. Esta es una fruta que cuenta con la mayor variedad. Cada país presenta sus especialidades y sus variedades. Pero el primer país en el cultivo de este fruto, y su mejoramiento, fue Canadá y en la actualidad lo sigue siendo. Es por ello que tenemos manzanas especiales para todos los usos y necesidades. Las hay jugosas, harinosas, ácidas, amargas, semidulces, dulces, tiernas, duras, muy duras, con almidón, sin casi almidón, eupépticas (digestivas), dispépticas o indigestas, laxantes, astringentes, para jugo, para dulce, para asar, para freír, para cocer, para hacer caldo, para aromatizar el ropero y otras más.

Recreamos la vista, el paladar, el estómago y el olfato con tanta variedad de manzanas, y casi todas pueden ser cultivadas en una región especial para su cultivo.

La manzana tiene especial indicación en los artríticos. Es alcalinizante y contrarresta el coeficiente acidógeno de los humores de las personas afectadas de dicha discrasia. Las sales que aporta la manzana neutralizan los productos ácidos resultantes del metabolismo de la albúmina.

Es anti úrica y por sus sales potásicas facilita la eliminación del ácido úrico. En este sentido la cura de manzana o el consumo regular de la misma reporta amplia utilidad. El Dr. Leclere, con su sólida autoridad, afirma: "una ración de 100 gramos de manzanas consumida en parte en el desayuno producirá apreciables efectos antiartríticos; también considera este eminente médico que la piel de la manzana, previamente desecada y tomado en decocción de la misma, tiene un gran poder uricolítico, esto es, eliminador del ácido úrico".

"Claro está que este preparado es anti comercial y poco sugestivo (acaso por demasiado sencillo) pero no por eso, sin originar perjuicios, deja de ser eficaz" nos dice el Dr. Leclere.

Existen variedad de recetas culinarias con las manzanas y la forma de comerlas. Pero repetimos que la mejor forma es comerlas como alimento o como medicamento en el caso de hacer una cura de manzanas. Y a pesar de que algunos (médicos inclusive) las recomiendan para postre, según mi experiencia de varios años, comiéndolas al finaliza las comidas suelen provocar algunos trastornos fermentativos y digestivos.

Otro de de los dichos ingleses que circularon sobre la manzana es:

"Comete una manzana al acostarte, y el medico... ¡con la música a otra parte!"

En muchos países hay dichos parecidos y cuentos de los milagros que la manzana hace.

Y hace una generación circuló por la prensa americana un pequeño apólogo que recapitulaba las muchísimas virtudes de la manzana.

Iba una niña por la calle comiendo una manzana y se cruzó con un famoso médico del pueblo.

"¿Sabes que estas comiendo? Preguntó el doctor a la niña.

-¡Cómo no! Una manzana. Respondió la muchacha.

-Estás comiendo (dice el médico) albúmina, azúcar, goma, ácido málico, ácido gálico, fibra, agua y fósforo.

La niña sorprendida le respondió -¡Ojala sea bueno todo eso porque suena alarmante!

-Es inmejorable. Si hoy comiste mucha carne en la mesa, el ácido málico neutraliza el exceso de materia gredosa causado por demasiada carne y con ello ayuda a que te conserves joven. Las manzanas son buenas para la complexión; sus ácidos expelen las materias nocivas que causan erupciones en la piel. Son buenas para el cerebro, al que varias materias nocivas hacen perezoso. Además los ácidos de la manzana disminuyen la acidez del estómago que viene con algunas formas de indigestión. El fósforo que las manzanas contienen en un buen porcentaje, más que ninguna otra fruta o vegetal, renueva la materia esencial del cerebro y de la columna vertebral. ¡Oh! Los antiguos no erraban al considerar la manzana como la fruta de los dioses, la magia renovadora de la juventud, a la que los dioses acudían cuando sentían envejecerse y debilitarse. Creo que hasta yo voy a comer manzana (dijo el médico) para concluir.

Nos dice el Dr. Leo Manfré en su obra: "7000. RECETAS BOTáNICAS"

La manzana comida con cáscara es muy buena para combatir la pobreza de la sangre. Es excelente en la anemia cerebral. Es bueno para el hígado y el estómago, como también para curar el insomnio. La compota de manzana tomada antes de acostarse, corrige la sequedad del vientre y produce un sueño tranquilo.

El cocimiento de una manzana grande, cortada y hervida durante diez minutos en agua, sirve para aliviar la inflamación de la vejiga y aparato urinario, como también para los catarros de los pulmones e intestinos. Se toman dos tazas por día.

El puré de manzanas con jarabe o azúcar quita las palpitaciones nerviosas del corazón.

Los ojos inflamados se curan con el jugo de manzanas agrias. Hay que lavarlos dos veces por día con unas gotas de jugo.

De una manzana se saca la semilla y se rellena el vacío con miel; se pone al horno y se come caliente para curar la ronquera.

El té de manzana es muy conocido en Inglaterra y conviene a todas aquellas personas predispuestas a fiebres e inflamaciones. Se cortan las manzanas en pedacitos, luego se revuelve y se añade jugo de limón y azúcar hasta que tenga un gusto agradable y refrescante.

También el café de manzanas es muy bueno para personas débiles de nervios. Se corta las manzanas en daditos, se secan, después se tuestan al horno, se pisa haciéndola polvo mezclándolo con café. Las manzanas tienen mucha fuerza curativa.

Las agrias producen sequedad y las dulces son diuréticas. Nausea y flatos desaparecen comiendo manzanas. Para la tos, dolores de pecho, fortificante para el corazón, es el jugo de manzanas mezclándolo con manzanilla y azúcar es excelente.

Un jarabe preparado con el jugo de manzanas calma los latidos fuertes del corazón, fortifica el estómago, baja la fiebre y es bueno para la melancolía. Un remedio notable contra hidropesía, cálculos y dolores de gota es el mosto de manzana, tomado consecutivamente durante algún tiempo.

Contra los resfríos es muy bueno ahuecar las manzanas y rellenarlas con miel, cocinarlas al vapor en un recipiente y comer algunas todos los días. Se puede acompañar con huevos y arenque. Cuando hay inflamación del blanco del ojo, que se pone colorado debido a un golpe e influencias catarrales, se hacen fomentos de manzanas dulces tostadas con cenizas caliente.

Remedios contra la diarrea: - Se fríe una manzana dulce hasta que se haga una masa blanda, luego se mezcla hasta unirla bien con tiza molida. Con eso se hace una cataplasma y se coloca sobre el ombligo del enfermo durante 24 horas, tratando de ponerla lo más caliente posible.

Contra las hemorroides se ha comprobado que la manzana y el mosto son los mejores remedios. Cuando hay calambres de pecho, vientre, estómago, tétano, se emplea la avena con el vino de manzana interior y exteriormente.

Este último se hace en la siguiente forma: Se hacen durante varias noches tres cataplasmas de avena hervida en vino de manzanas y se pone sobre la parte afectada. Se deja hasta que esté completamente fría.

Contra la epilepsia y baile de San Vito se toman durante tres noches baños con el vapor del vinagre de manzanas. Debe estar el paciente completamente desnudo sentado sobre una silla y tapado con una toalla de baño para que no se escape en vapor, tratando de que este aire entre en todas las partes del cuerpo.

Comiendo manzanas y tomando agua es muy saludable en ayunas y de noche. En la disentería se dan tres cucharadas a los mayores y una a los niños de vino puro de manzanas. Si persiste se pone cataplasma de hilo doblada en seis partes empapada en vino de manzana y se deja hasta que se enfríe.

Para la gota se frotan los brazos y piernas diariamente con vino de manzanas bien caliente.

Compresas calientes de vino de manzanas y vinagre de manzanas (en partes iguales) son excelentes para los dolores de reumáticos y nerviosos de la nuca, así como para los miembros paralizados, en cuyo caso da muy buenos resultados.

Contra los grandes sudores la cura con manzanas al interior es un medicamento conocido. Los asmáticos, y todos los que sufren de males análogos, tienen que hacer uso de compresas calientes embebidas en vino de manzanas (franela doblada seis veces), si hay flema, se hacen las compresas cocinando avena con vino de manzanas y se pone bien calientes, dejándolas hasta que se enfríen.

Para afecciones de hígado y bazo, en las cuales los dolores son periódicamente más fuertes, sirven los fomentos fríos de agua de manzanas, leche y agua en partes iguales en un lienzo doblado varias veces. Hay que cambiar el fomento cada minuto.

En la angina, dolores de garganta y ronquera, también se emplea el mismo procedimiento. También se pueden poner fomentos calientes del vino de manzanas y dejar hasta que se enfríe. Inflamaciones interiores y exteriores se curan con zumo de manzanas bebido.

Para los que tienen solitaria, gusanos o ascárides, es muy bueno tomar seguido de este vino y más pronto es la cura si se acompaña con zanahorias frescas.

Enfermedades de los oídos con dolores principalmente en niños escrofulosos, se alivian con cataplasma de avena con vino de manzanas calientes para que se ablanden y salga el fluido.

Podríamos seguir escribiendo mucho más de las propiedades de la manzana, pero creo que con lo dicho se dará cuenta el lector de las maravillosas propiedades de la manzana.


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