• - ¾ kilo de sardinas frescas
• - 20 gramos de piñones
• - Dos cebollas
• - Unos ramitos de perejil
• - Una cucharadita de azúcar
• - Harina
• - Vinagre
• - Aceite
• - Sal

1. Poner las pasas a remojo en agua tibia.
2. Desescamar, eviscerar y lavar bien las sardinas, dejándolas escurrir.
3. Pasarlas por harina y freír en aceite muy caliente.
4. Una vez doradas dejar sobre un papel de cocina para que absorba el exceso de aceite.
5. Por otra parte, se sofríe la cebolla en rodajas, hasta que quede transparente.
6. Añadiremos entonces el vinagre (un taza de café como máximo), el azúcar, los piñones enteros y las pasas escurridas y secas.
7. Se deja cocer el conjunto unos 3 minutos a fuego lento y luego se vierte sobre las sardinas, se deja en el fuego otros 5 minutos y para servir se espolvorea con perejil muy picado.
8. Se pueden tomar de inmediato, calientes, o una vez frías escurridas, con los piñones y las pasas.

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